Es el peor hotel de 4 estrellas en el que me he alojado últimamente, sus instalaciones y servicios no llegan ni a tres estrellas. Las 3 primeras noches, muchos pasamos frío en la habitación. Pedimos la calefacción y nos dijeron que no funcionaba. El colchón era viejo y deformado, pedí que lo cambiaran y a la tercera noche me pusieron otro que no era ninguna joya. Al tercer día después de mis quejas por frio, me trajeron una estufa más vieja que yo y encima sucia, pero bueno algo calentaba. La ropa de cama y almohadas muy ordinarias y las mantas antiguas y sin precintar. La puerta de la hab. no cerraba por dentro y tuvieron que venir a repararla- Las toallas del lavabo muy finas y sin rizo, nada de jabones ni cosas para el aseo, dos simples dosificadores de gel para todo y listo, en el espejo poca luz, el secador flojito. La terraza vieja y con los muebles viejos y sucios. La limpieza de habitaciones muy ligerita. Los ascensores viejos, tercermundistas y sin memoria, despintados, con el espejo y teléfono de emergencia rotos, Los desayunos pobres y repetitivos. Las comidas, muy baratas y mal guisadas los 7 días exactamente lo mismo más o menos y muy mala calidad. La fruta y los postres siempre los mismos y poca calidad. El postre estrella era piña natural que volaba en cuanto la sacaban. Toda la gente con la que hablábamos se quejaba de lo mismo. En fin se podrían decir muchas más cosas, pero pocas buenas. La animación la misma y muy pobre en los siete días. Repito, este hotel no llega ni a tres estrellas. Dicen que lo han reformado, habrá sido la empresa de Pepe gotera y Otilio. No quiero pensar cómo sería antes. Y lo peor es que no parece importarles mucho a pesar de que se quejaba mucha gente en la recepción. Yo intente hablar con el director dos veces sin conseguirlo. Este hotel no se lo recomiendo a nadie, a pesar que una de las poquísimas cosas buenas es su situación cerca de la playa. Quién otorga las estrellas, debería pensar más a quién se las da.
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