El entorno donde se emplaza el hotel es lindo, pero las habitaciones son minúsculas, no tienen siquiera frigobar, abrís la puerta y te chocas con la cama. El desayuno es muy rico pero lo tenes que pagar aparte y el problema es más que nada el precio: cuesta el doble que cualquier otro hotel. Yo reserve por booking teniendo como precio el valor en la moneda pesos Argentinos: grave error, luego recibo un mail del hotel con el precio en euros. Carísimo por lo que es. Traté de cancelar el mismo día en que reserve, al darme cuenta pero no me dejaba (me cobraba casi el total de la estadía). Hablé con el lugar para explicar y consultar el por qué del precio al doble que los demás lugares y me dijeron que me tendría que haber fijado bien antes de reservar (con razón) no fueron capaces siquiera de bonificarnos el desayuno como forma de compensar. Dice que es spa pero no pudimos usarlo porque estaba todo ocupado ya hasta la noche. O sea nada, todo mal. No volveríamos y no lo recomendamos. Mucho mejor el Hotel Les Fleurs en la misma ciudad y a mitad del precio y atendido por sus dueños muy amables (fuimos allí a cenar al resto).
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