拉菲爾蒙蒂娜精選飯店

hotel molto accogliente a lecce, personale gendile e sempre disponibile,posto molto solare e carino, consiglio per chi viene qui con amici o amiche, molto felice dell'esperienza passata, e come altri hotel in salento, non sono rimasta delusa nemmeno qui, quindi ve lo consiglio se state viaggiando in salento per lavoro o divertimento!

La struttura è molto bella, come la stanza. Ospitalità e servizio eccellenti, e la posizione è decisamente ottima, sia per l'arrivo in macchina che per la vicinanza al centro. L'accoglienza, la cortesia dei collaboratori dell'hotel e veramente degna di nota. Ottima esperienza da consigliare senza alcun dubbio!

Que lugar tan más bonito, desde que llegamos es precioso por fuera, por dentro, sus jardines, el lugar, te sientes super cómodo. El staff es increíble en especial Stephania, pero todos divinos, era nuestro cumpleaños y nos mandaron un pastel. Nuestro cuarto espectacular!!!! Sin dudarlo regresaría a este hotel cuando volvamos a regresar a Lecce

Se trata de un tranquila propiedad de lujo, distribuido en tres edificios distintos contiguos, situado a pocos metros caminando del centro histórico de Lecce. Está rodeado por un pequeño jardín y una piscina con terraza que, en meses de más calor, debe ser un rincón muy deseable. Disfrutamos de una maravillosa estancia de tres noches con todo tipo de detalles, atenciones y comodidades. Todo el staff contribuyó a ello con su amabilidad y cortesía, sin agobiar innecesariamente al cliente, respetando su intimidad y, lo más importante, transmitiendo una familiaridad hacia el huésped y entre el propio personal del hotel, que creo que constituye uno de los puntos fuertes de La Fiermontina. Quisiera personificar esa familiaridad en Francesco y Alessandro, a riesgo de olvidar a todos los que contribuyeron a hacer nuestra estancia inolvidable. Volveremos a Lecce y, sin duda, a La Fiermontina.

Hôtel comme on souhaitait en bénéficier plus souvent. Les chambres, le jardin l'accueil, tout est au meilleur niveau. L'emplacement est idéal dans la vieille ville sans qu'on soit obligé de laisser sa voiture loin de l'hôtel.

C’est un plaisir de séjourner dans un hôtel de cette qualité. J’ai malgré tout trouvé que la salle de bain était un petit peu petite et que les chambres du rez-de-chaussée n’avait pas énormément de lumière! Ce qui pourrait être un avantage quand il fait chaud. Notre chambre avait une belle taille, très agréable et très bien décorée!