El encanto del sitio lo nubla el mal servicio y pésima gestión de los encargados del cortijo. La recepción fue nefasta, muy atropellada y apenas nos dieron las llaves , se marcharon sin explicarnos ni ofrecernos ninguna información del complejo, así como de las opciones que ofrecían en cuanto a cafetería, uso de la piscina y posibilidad de realizar actividades en el entorno. El desayuno iba incluido , pero no respetaron el horario del mismo, ya que comenzaba a las 8,30 y apareció la encargada a las 8,53h, alegando que tenía necesidades fisiológicas . No supieron contrarrestar este desagradable malentendido , alegando que , hay escaso personal y que tienen otras necesidades más importantes que atender ( poner baldosas , recoger a la niña del colegio, etc)., cuando lo más importante es dar cobertura a los clientes que, como nosotras , decidimos ir a este sitio para tener relax y buena estancia . Esta experencia nos deja con mal sabor de boca y poco nos invita a regresar . Una pena que por el servicio se carguen un lugar tan bonito .
滿意
18 評價