Muy amablemente nos reservó por whatsapp una habitación el dueño de este increíble lugar. Íbamos mi marido, mi hija y yo, así que booking no nos permitía reservar una habitación doble. Sin ningún inconveniente puso una colchón supletorio en la estupenda habitación y nos alojamos en esta pequeña guesthouse (creo que solo tiene 3 habitaciones), con terraza individual desde donde se contempla unas vistas maravillosas de arrozales y montañas verdes. A la espalda está la montaña más alta de Bali, pero no la vimos porque las nubes lo cubrían durante todo el día. Allí puedes desayunar, comer, cenar.... aparte de contemplar la belleza del paisaje, gente trabajando en los campos, niños volando cometas y algún otro paseo para observar la vida local, poco más se puede hacer en Sidemen. Así de maravilloso es este lugar. Veníamos de la bulliciosa Ubud, y de cuatro días de tour completos, así que este lugar fue un remanso de paz. Habitaciones y baño amplios y limpios, camas muy cómodas, personal amabilísimo pero que no habla un inglés muy fluido. Un lugar muy especial que nos encantó visitar.
翻譯