阿爾瑪精品飯店(Hotel Boutique Al Alma)

Divino el hotel , servicio inigualable , solo Mejoraría colchón y almohadas Estando bien las actuales , solo que el resto está perfecto , y estas dos están ligeramente por debajo

No tengo cómo agradecer a este equipo de trabajo. Desde la niña de recepción hasta las personas de restaurante. Llegue enferma y en realidad su atención me hizo sentir como en casa. Eso en atención!!! El lugar es hermoso, la comida se veía deliciosa, no pude comer por mi mal estar.

Hemos estado durante 5 noches. En general no está mal, pero para su precio y como se venden deja todo que desear. Se esperan cosas básicas como silencio y buena atención en algo que llamen un hotel boutique y no lo hay. NO esperen habitaciones silenciosas porque todo lo de afuera se escucha (incluyendo el restaurante que es abierto al público). No hay recepción 24 horas tampoco y dejan unas llaves para entrar y salir. Entre varios temas pasa: - No estaba bien controlado el acceso de personas del exterior a la zona de huéspedes. En algunos casos hasta los atendían. - El servicio era muy lento, tocaba preguntar varias veces para que tomaran una orden e ir hasta la cocina. - Se dañó el aire acondicionado y no fueron diligentes en arreglarlo. Tocó preguntar varias veces y las respuestas son como para dilatar la solución. El aire literalmente en la pantalla marca el error. - No había control del ruido de los huéspedes, niños gritando, salpicando agua a otros. - En general no había nadie pendiente del cuidado, aseo y control de la zona de la piscina (la piscina llena de hojas y ramas todos los días). - Las habitaciones no son silenciosas, si alguien habla duro se escuchaba todo, también el ruido dentro de las habitaciones se puede escuchar afuera. - La calidad de la comida es buena, pero en algunos casos podía demor**** más de una hora en traerla y no sincronizada. Se demoraron más de una hora haciendo una ensalada fría, que no había que cocinar. - El wifi no es el de mejor calidad, si requieres trabajar no es posible por la mala calidad del wifi. Durante los cinco días fue mala la red wifi. - Los meseros no están pendientes de si uno quiere algo, toca par**** e ir a decirles. (Brayan muy atento y eficiente). Hasta para que limpiaran la mesa había que decir hasta tres veces. Servían el desayuno y los cubiertos llegaban al rato. Los platos no son sincronizados, pueden llevarle a alguien algo y a los 20 minutos al otro, si uno quiere desayunar al mismo tiempo no pasa. -Toca pedir que cambien toallas. -Literal hubo un día que no había limón, sandía, croissants y varias cosas tenían eso. En realidad es triste que haya potencial de un lugar de alta calidad, pero por temas servicio y falta de gestión y control sea un lugar mediocre. Como planta física, las habitaciones son lindas, bien dotadas (les falta minibar y más que no hay servicio después de las 9pm). A la piscina le falta aseo y las a soldadoras están viejas y sucias. Escuchamos que a otros huéspedes tampoco les funcionaba bien el aire acondicionado. El desayuno es delicioso y mucha variedad, el cual está incluido. Lastima el servicio y las demoras. Si tuvieran meseros pendientes de la piscina venderían más bebidas y cosas para picar por ejemplo. Creemos que falta un buen líder de servicio que esté pendiente.

Fuimos a comer, primero no podían ofrecernos varios platos que escogimos porque “aún no les llevaban el mercado”, al recibir lo que pudimos pedir la soda tenía exceso de azúcar y la pizza estaba un poco cruda en la masa, a lo cual el mesero nos dijo que tenían el horno malo. Muy mala experiencia.

Me encanto el lugar, a una cuadra y media del parque de Santa Fe de Antioquia, las habitaciones son grandes, amplias, aseadas, modernas y con aire acondicionado. Es un hotel muy privado, pocos huéspedes y atención personalizada, y la mejor parte la comida, tiene una línea de repostería deliciosa y su especialidad es el brunch, sí no te vas a hospedar te recomiendo ir a desayunar allí.

Excelente servicio del personal. Meseros muy amables

De verdad increíble. No me imaginé el servicio tan bueno. La calidez de las personas qué atienden. Estuve en la casa y se siente uno como en su propia finca. Se verdad los felicito. Volvería muchas veces. Con amigos incluso. Súper tranquilo. La comida deliciosa.

Visitamos junto con mi esposa y mi hija el hotel al alma. Iniciando por la arquitectura, interiores, servicio y el sello del restaurante al alma, todo sobrepasado nuestras expectativas. Un espacio para volver con amigos y familia. Espero estar prontamente visitandolos.

La mejor experiencia hotelera que hemos vivido en este sector antioqueño, la atención es maravillosa, la alimentación espectacular… las instalaciones perfectas, lo que hizo mágica nuestra visita, siempre lo escogeremos al volver. Muchas gracias.