El hotel es excelente, muy nuevo. Al llegar en la habitación había un plato con fruta fresca, es genial poder contar con opciones saludables, en lugar de los típicos bombones. Las camas súper cómodas, y disponen de carta de almohadas. Todo está cuidado hasta el más mínimo detalle, el buffet del desayuno totalmente recomendable. La ubicación no puede ser más céntrica, todo el personal fue muy amable, y al irnos nos obsequiaron con una botella de la bodega del dueño del establecimiento. Repetiremos seguro ☺️
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