Esta casa museo era propiedad de un matrimonio (el: Boschi, ella: Di Stefano). La pareja habitó allī y utilizó las paredes de su residencia como sostén de una impactante colección de arte italiano del Siglo XX. Fue su voluntad que las puertas de la casa se abrieran al público una vez fallecidos.La colección de pinturas, esculturas y grabados está ordenada cronológicamente, por lo que permite recorrer intuitivamente la historia del arte de Italia hasta mediados de los años 60.Muy recomendable.