Gracias a quienes nos recibieron con tanta amabilidad, respiramos luego de una mala experiencia de un hotel cercano la noche anterior. Fue como un bálsamo. El siguiente paso fue descubrir su blanca limpieza, sus azules, verdes y una decoración tan agradable es la primera excelente impresión. El bar de café, la cafetería del loby y el 24 horas de la piscina, nos orprendieron con el aroma intenso del café de tan buena calidad y la variedad en cafés fríos. Los hotdog del snack bar riquísimos. Abundante el buffet y como ya vivimos en Cayo, los servicios de camareros y cocineros muy bien. La "cena de humo" recomendable, muy buen show en la piscina. Antes en el teatro se presentó una banda de rock excelente. La playa super cerca y muy linda, estamos en el módulo cascada, habitaciones cómodas, comunicadas (en familia). Aire acondicionado muy bueno, ventilador de techo. Ducha con abundante agua. Así que merecen 5 puntos. Abundante comida en el bufet. Sombrillas para el sol o la lluvia en la habitación es casi imprescindible en este clima. Todo el personal muy atento.
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