雙鹿飯店

Nos alojamos cuatro noches con mi marido en el mes de diciembre, para pasar la Navidad. Es un hotel que seguramente tuvo una época de esplendor, pero que actualmente le falta bastante mantenimiento. La habitación era cómoda, se accede por escalera. El desayuno del primer día nos pareció completo, pero al ir pasando el tiempo los productos eran los mismos, se notaba la ensalada de frutas un poco ácida. Las medialunas, los panes y el queso estaban secos, el jugo era horrible. Estuvimos nosotros solos durante toda la estadía. Al reservar nos avisaron que había un evento, ya que tienen un salón de fiestas, pero no tuvimos ningún inconveniente. Lo lamentable fue el estado de la pileta, la misma se encontraba sucia y hasta en el fondo pudimos ver elementos plásticos que nunca limpiaron. Cuenta con un amplio parque, pero muy descuidado, con algunas reposeras que no estaban en condiciones para usar y vasos de vidrio rotos que quedaron de la noche de la celebración. Destaco solamente la excelente atención de todo el personal. Por el precio pagado elegiría otro lugar. Se ubica a varias cuadras del centro, pero cerca hay lugares para comer, donde los platos que sirven son abundantes y económicos.