海豚全包式飯店

Hotel pequeño, tranquilo, con piscina y salida al mar, donde hay un pequeño arrecife y se puede caretear, vimos diferes peces de colores, erizos, cangrejos. El Restaurante frente al mar es un espectaculo, la comida deliciosa, todos son muy atentos y todo limpio. Habitaciones amplias, con aires acondicionados nuevos, cómodas. La ubicación es lo mejor a 2 minutos de las mejores playas de San Andrés, se puede caminar y usar las instalaciones de dos hoteles muy cercanos de Decameron. En la esquina del hotel ya estas en la zona comercial por deseas hacer compras. La experiencia de mi familia fue única y muy grata, el trato a mi hija el mejor.

Nos alojamos por 4 noches, teniendo una pésima experiencia, un engaño total con todo el servicio que dicen ofrecer, el precio que pague no fue justo con el servicio que recibí, desde la recepción en adelante se puede apreciar el abandono de las instalaciones, el sofa super socio las mesas dañadas, es una mala imagen, adicional llegamos muy temprano aproximadamente a las 6:45 am el hotel estaba cerrado y la persona que se encontraba en la recepción, no fue capaz de abrirnos apenas nos vio, y darnos la bienvenida por lo menos con un saludo, íbamos cargados de equipaje ya que tenemos un bebe, y aun así viendo no fue capaz de ayudarnos con las maletas ni nada, las fotos que se ven no son nada comparadas al estado actual del hotel el hotel se encuentra en un pésimo estado no le hacen un correcto mantenimiento, la chapa rota de la habitación el aseo pésimo debajo de las camas se nota que no barren ni trapean , en los días que nos quedamos solo entraban a tender las camas pero no aseaban el baño, me toco pedir cambio de toallas porque las señoras no hacen el cambio, el desayuno siempre era lo mismo cambiaban si acaso un alimento, no había opción de escoger, decían que snacks ilimitados y mentiras solo eran en determinados horarios y siempre lo mismo, al momento de vender el paquete nos dijeron que podíamos ir a los otros hoteles eso si con la claridad que el isleño no incluía, el cual también fue un engaño porque solo abrían unos cupos limitados que tocaba reservar muy temprano en la recepción, se supone que estas de vacaciones no quieres madrugar antes de las 7 am para hacer una fila y que te digan que ya no hay cupo, solo pudimos visitar el Maryland en el almuerzo, en las noches no hacían actividades recreativas como nos habían indicado o por lo menos en Delfines. No recomiendo alojarse aquí

El hotel es bonito, pequeño, pero el servicio de los funcionarios es pésimo, por lo que no lo recomiendo para nada, hacen mala cara lo cual hace que los días que pasas aquí supuestamente para estar en familia y disfrutando se vuelvan horribles y quieras irte. El hotel no tiene buffet, solo a la carta así que con la mala actitud en el bar y en el restaurante cada vez que pides algo se vuelve una situación desagradable ya que inevitablemente debes comer y beber algo. En cuanto a la infraestructura, tiene bonita vista, no tiene ducha en la piscina, y se escucha mucho el ruido de los bares de afuera. Aun así si hubiera buen servicio pues hasta volvería pero con esa actitud de quienes son los encargados de atender al huésped no lo recomendaría para nada a futuros viajeros, ni yo volvería, es mejor que se hospeden en otro hotel

Hotel bemmmm simples . Não condiz com as fotos ! Os quartos são apertados , ar condicionado funcionou bem, chuveiro razoável , acústica do quarto pessima , não consegui dormir com o vizinho de quarto roncando , até a televisão do vizinho vc escuta . Café da manhã bem simples , variedade nenhuma , pães , 3 tipos de frutas, ovos e uma panqueca totalmente sem sabor . O bar da piscina é HORRÍVEL, na verdade é uma barraquinha , cerveja quente , drinks PESSIMOS , atendentes mau humorados , estávamos com copos térmicos e não queriam servir duas cervejas ao mesmo tempo, só serviam de uma em uma (lata). O almoço é jantar é a lá cart , vc tem umas 5 opções de prato , escolhe e eles preparam ! Isso sinceramente não é All inclusive nunca !!!!! O único ponto positivo foi a localização , bem no início do calçadão !

las instalaciones un poco obsoletas pero en general muy bien, lo desagradable de la estadía es que mientras estuve por fuera en toures que generalmente se gasta todo el día, las camareras aprovechan sacando información financiera de la habitación, por poco me estafan con las tarjetas de crédito, afortunadamente no había cupo en las tarjetas que dejé en la habitación razón por la cual la deje en la misma

Las instalaciones del hotel en pésimas condiciones. Pedí una habitación junior suite y me dieron la habitación del fondo! Ósea, tenía una “gran vista a la calle” La atención en el restaurante muy mala, parece que nos estuvieran regalando las cosas. En base a esta experiencia que tuve, la verdad no creo regresar más a san Andrés.