拉斯特拉飯店

Muy mala experiencia Mal olor los tendidos de las camas Muy viejos y rotos No recomiendo el hotel

El hotel está ubicado en una zona tranquila y segura, asistimos a un evento en el Centro Expositor y fue excelente opción ya que nos pudimos desplazar caminando. Las instalaciones del hotel están bien sin embargo le falta un poco de mantenimiento. Las habitaciones son pequeñas pero cómodas y cuentan con lo necesario, una plancha hubiera sido de gran ayuda. No cuenta con caja de seguridad. Estuvimos en la habitación 406 y durante la estancia reportamos la TV ya que estaba desprogramada pero una persona acudió a arreglarla. Nos costó un poco de trabajo usar la regadera ya que el automático para cambiar de la tina a la regadera no funcionaba correctamente. La cortina de la habitación estaba rota. Me gustó que tenía buena ventilación e iluminación natural. El personal es amable, sobre todo las chicas del restaurante y el personal de limpieza. Las chicas de Recepción no todas son amables, sobre todo la chica del turno matutino, no recibí un saludo o una sonrisa de su parte, y cuando le preguntábamos algo recibíamos una respuesta negativa, con malas caras y cero ayuda, lástima, ya que la Recepción es el primer contacto con el cliente. Tomamos el desayuno en el restaurante y aunque es muy básico es sustancioso, por ser huésped tienes una tarifa especial de $125.00 pesos por persona. Si te gusta caminar puedes desplazarte del hotel hacia el centro en corto tiempo y disfrutar de la ciudad.

Me gustó la cercanía a los lugares a los que iría. No me gustaron las habitaciones muy encerradas y sin vista, la alberca fría y la atención de la señorita de la recepción que no encontraba mi reservación correcta, se desesperó y se enojó.

Definitivamente fue muy desilusionante, después de ser un gran hotel , se ha venido para abajo en apariencia se ve bien pero una vez entrando a los cuartos es una experiencia que no le deseo a nadie en sus vacaciones, las camas, las sábanas, las cobijas sucias, no tienen aspiradora para recoger el polvo de las alfombras y lo hacen con escoba así que todo el polvo se sube a las camas al tocador a nuestras maletas, la tina de baño y los lavaderos están tapados, así que cuando te lavas lo dientes el agua se queda ahí por mucho tiempo al igual la tina de baño, el mal olor de los cuartos se quedaron en mi mente y aún no he podido superar ese olor. Se me pidió dinero extra para darme un mejor cuarto y no fue así , al entrar uno de esos cuartos olía a orines y al bajar a preguntar el por qué el nuevo cuarto que pague dinero extra olía tan horrible, me dijeron que supuestamente tienen un gato y se orina en las camas, tuve que salir a comprar productos para que el olor del cuarto no fuera tan horrible y pudiera dormir … una experiencia que no recomiendan a nadie.

Fácil la llegada a pie del hotel a la feria, lo único que no me gustó fue que había música un poco fuerte en la alberca desde muy temprano y no pude dormir un poco más.