慕那爾大象通道度假村

Tout était parfait, pour une commande de gambas frais, la cuisine a effectué 350 kms AR pour récupérer à la mer les produits et tout cela pour 32,50 euros au total, le prix d’un seul Plat chez nous, un rêve. Chambre somptueuses Service au plus prêt, piscine à débordement , bref tout pour plaire à recommander, de plus à proximité des plantations de thé. Surtout ne rater pas cette opportunité.

Un très bon séjour dans un lieu calme et serein très bien situé non loin des plantations de thé et des parcs naturels. La cuisine est excellente et le confort remarquable . A moins d’une heure de voiture nous avons eu la chance d’observer des éléphants sauvages

El hotel es bastante bonito y las habitaciones son bonitas y espaciosas. La cama es muy cómoda. Lo peor de la habitación fue que la máquina de aire no tenía aire caliente y en el mes de julio cuando estuvimos hizo bastante fresco, y en la habitación hacía frío. Preguntamos y uno de los recepcionistas nos dijo que no había, pero luego otro nos dijo que sí y que vendría un técnico, que lo único que hizo fue poner el modo de calor en la máquina y subir los grados pero la máquina no lanzaba calor. Estuvimos mirando con ellos en otra habitación y pasaba lo mismo, por lo que no tienen disponible esta opción de climatización. Considero que es algo importante que deberían mejorar en un hotel de montaña, donde baja la temperatura por la noche. La piscina es fantástica aunque no nos bañamos porque no hacía buen tiempo. El desayuno me pareció bastante pobre para un hotel de esta categoría. El tostador no funcionaba bien y como opciones adicionales al desayuno indio, solo había tostadas, que además no se podían tostar. La cena sin embargo sí que estuvo bien. Había bastante opciones y estaba todo rico, especialmente el primer día que tenían platos cocinados en el horno tandoor en el momento. Parte del personal podría mejorar porque con el tema del aire parecía que no se enteraban mucho y el día que nos fuimos estaba estropeado el ascensor y tuvimos que bajar nosotros las maletas por la escalera y nos vieron desde abajo pero se hicieron los despistados y no se ofrecieron a ayudarnos, o a mandar a alguien a ayudar.