Nos encantó el hotel y las instalaciones, ya habíamos conocido años atrás y deseamos volver. Situado en una de las mejores playas de la isla y su cercanía a la playa lo hace super encantador ya que desde las habitaciones se escuchan la rompiente de las olas . Es ideal para pasar días tranquilos y seguros . El personal siempre con una sonrisa y atento a nuestras necesidades. El desayuno fresco , variado y riquísimo , la atención de Yudislaydi (yesii para nosotros) que todas las mañanas nos recibió con la mejor de las sonrisas. Gracias a todo el personal Miguel , Tamara , Vanio, Julio , Emerson , que estuvo en nuestra estadía por tan linda atención.
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