卡薩巴貝爾飯店

Excelente atención del personal, eso fue lo que mas nos gustó. Las instalaciones, habitación, baños, spa, muy limpias. La decoración esta perfecta, nada recargada, y hay por el hotel objetos antiguos, muy curiosos y bien cuidados. Ha sido un finde de lujo. En el restaurante se cena de diez, así que ninguna pega a este lugar. Muchas gracias

Fue una escapada inolvidable, cogimos la suite real, una habitación espectacular con todo lujo de detalles, la mejor opción si quieres sorprender a tu pareja, la cena del hotel buenísima, también cogimos la cata de vino q nos encantó pues la chica nos lo explicó todo de lujo, y los masajes q nos dieron fueron de 10! La masajista trabaja genial. Y qué decir del trato de la recepcionista con la que estuve en todo momento en contacto, gracias a ella todo salió perfecto, le estoy súper agradecida. Sin duda este hotel se ha convertido en un imprescindible de mis escapadas! Recomendable 200%!!

Extraordinario el hotel , preciosas las habitaciones y las zonas estanciales Recomendable especialmente para parejas y tranquilidad. Restaurante excelente , atendido magníficamente por Mara . Lo único a mejorar , la atención telefónica del chico de recepción y el ruido del aire acondicionado Por lo demás , de 10

Por teléfono la atención es bastante mala. Secos y parece q te perdonan la vida. El hotel genial pero un poco más de amabilidad atendiendo sería recomendable . La verdad que te quedas un poco parado de la poca amabilidad inusual en este tipo de hoteles

Iba con mucha ilusión de pasar un fin de semana en pareja y fue decepcionante. La habitación (junior suite) estaba en la primera planta y se oía todo el ruido del restaurante (si preferían postre o café, etc..), por tanto no hubo manera de dormir la siesta. El colchóh se hundía hacia el centro. Al ir a cenar, llegamos pronto y no había ninguna mesa ocupada, la encargada nos asignó una mesa y como estaba junto a la puerta de entrada a la cocina le pedimos que nos la cambiara y nos dijo que no era posible (la primera vez que me ocurre en un restaurante que, habiendo mesas libres iguales, no te la quieran cambiar). Finalmente, al ir a abonar la estancia nos habían cobrado dos veces la cena (bueno, es un error que todos pueden cometer). De manera manual nos descontaron la cena y según el resultado, pagabamos cuarenta euros de dos coca colas, una cerveza y un cortado de la cena (evidentemente otro error). Bueno, es probable que ante tantas buenas calificaciones, hayamos tenido mala suerte....

El lugar es encantador, tanto por el buen gusto de la restauración de esta casa señorial como por la amabilidad de todo el personal. Limpieza exquisita, cuidan cada detalle. Nos hemos sentido extraordinariamente.