Nuevamente hemos disfrutado unos días en este maravilloso Hotel. Son ya numerosas las veces que nos hospedamos desde el año 2016. Cada vez que vamos vemos que la calidad se mantiene, incluso en algunos aspectos mejora y eso es un plus a la hora de alojarse en un hotel, ver que no merma la calidad y que se esfuerzan por mejorar día a día. Esta vez fuimos en familia, con nuestra bebé, el año pasado eramos dos y este fuimos los tres. La verdad que el trato que nos han dispensado ha sido maravilloso, el cariño y la atención que le han dado a nuestra niña ha sido espectacular. La habitación cerca de recepción como pedimos y súper bonita, con una terraza enorme, gracias por esa habitación (428), con su cunita y todo lo necesario para disfrutar. Las instalaciones muy bien cuidadas, limpias, a punto para esta nueva temporada, se nota que tienen un mantenimiento de 10. Los jardines, piscinas, piscima climatizada, etc, todo genial. El servicio de bar en piscinas, sus restaurantes, da gusto como todo funciona a la perfección. El desayuno de 10, con gran variedad de platos fríos y calientes, fruta, zona de Vital Corner, un plus sin lugar a dudas, plancha para platos preparados al momento. La cena buffet también con muchísima variedad, todo tipo de comida, cada noche de un país diferente. A nuestra pequeña le prepararon un puré de verduras que le encantó, a nuestra disposición durante todos los días que estuvimos, gracias de corazón al cocinero José López, un chico encantador que estuvo muy atento en todo momento y gracias a él la niña "devoraba" esa comida. Comimos uno de los días en el restaurante la Bahía, un arroz con bogavante y una ensaladilla de pulpo, ambos platos buenísimo y de postre su brownie de choco blanco con pistachos, buf, espectacular. Gracias a todo el personal, por su atención, cordialidad, buen trato, por sus continuos detalles, por sentir que la máxima de sus trabajadores es satisfacer todas nuestras pretensiones, superando con creces nuestras expectativas. Gracias a José Lopez, Lupe, Carmen, Ana Belén, Leticia, Eva, por ser tan buena gente. Gracias a la gente de recepción, a los chicos que se ocupan de las maletas, vigilantes de las piscinas, personal del spa, cocina (ese chocolate con leche y nueces que hacen es el mejor que hemos probado), servicio de limpieza, en general a todo el equipo. Gracias por darnos la plaza de garaje en la zona exterior. El año que viene volveremos.
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