孔德飯店(Hotel Conde)

Buen trato, familiar y amable. Mobiliario antiguo pero con encanto. Limpio. Sin ruido. Funcional. Buena comida. Pasamos una noche agradable. La cama cómoda. La carta del restaurante es muy variada y el servicio rápido. En resumen: buen sitio.

Lo mejor el precio de la habitación y la amplitud de la habitación. Necesita algunas mejoras en el cuarto de baño. Muy poca presión de agua tanto en ducha como en el vater.

Un sitio muy cuidado y con un staff muy amable y cuidadoso

Personal simpático y atento. Habitaciones cómodas.

Muy bien calidad - precio. Colchones y almohadas muy cómodos. Puedes comer muy barato en el mismo hotel.

No esta mal. Basico, lo justo.

No se puede pedir más en relación calidad / precio. La recepcionista / camarera una maquina. Muy buen trato del personal. Comida totalmente casera. Desayuno, bolleria a elegir y zumo natural. Tienen menú diario y otro de fin de semana o carta a elegir por si quieres comer allí. A mejorar, la presion del agua caliente en horas de mucho consumo. Se oye los ruidos de otras habitaciones pero logico en estos tipos de hotel, si quieres lujos paga uno de cinco estrellas.

Reservamos una habitación con cama de matrimonio, ( confirmado por teléfono por la mañana) llegamos al hotel, nos entregan la llave en la tercera planta, para nuestra sorpresa al entrar, nos encontramos con 3 camas... Baja mi pareja a avisar que se habían equivocado, la contestación del camarero que nos había atendido al llegar, fue que no era su problema, y que nos devolvía el dinero y nos fuéramos... Cogemos nuestras cosas, bajamos, y esta vez nos atiende un señor mayor, al cual le contamos lo sucedido, y se quedó blanco, creo que no se lo creía ni él, cuando le enseño el móvil con la reserva de una habitación de cama de matrimonio, y nos habían dado una de 3 camas... Nos devuelven el dinero, y otro camarero intenta convencernos de que nos quedaramos, pero ya con el mal cuerpo.que teníamos, las ganas de salir de allí cuanto antes eran enormes. A las 12 de la noche salimos por la puerta, de vuelta a casa, 3 horas en coche...intentando olvidar un suceso que en mi vida fué tan desagradable.

En plena pandemia y no dejaban comer en la terraza. Las sábanas estaban sucias (pelos, migas etc) y pedimos otras. Nos cambiaron de habitación y resultó ser un cambio a peor. Era una planta más arriba y con ventana a la carretera y a la gasolinera (la otra daba a un hueco entre habitaciones) pero había más ruido, más humedad, tenía grietas, estaba como en desuso y había arañas y polvo... Y lo peor, que no llegaba bien el agua a la 3a planta, horas sin una gota de agua. Aparcabas donde podías, si no quedaba hueco podías dejarlo donde la gasolinera que hay justo pegada al alojamiento.