La Aguada Hotel Boutique de Montaña

no podíamos creer que la comida que sirven es congelada. Además de un muy básico menú cenamos pastas sacadas del freezer. Lo mismo con el desayuno, no tienen nada del día. Dejamos nuestras cervezas en la heladera que poseen en la cocina y nos dimos con esta situación.

Que lugar!! para el descanso, asegurado, sin lugar a dudas. Enclavado al pie del cerro, entre arboles que vieron mucha historia, esta casa transformada en hotel, con detalles cuidados al maximo. Son cinco habitaciones, elegimos la de planta alta, como fuimos fuera de temporada, practicamente estuvimos solos. Solo el ruido de las vacas, que a veces se ganan la entrada al parque. Hermoso, para desconectarse. La pileta, nada del otro mundo, en octubre estaba sucia todavia, la laguna (artificial) da el pie para desacelerar. El desayuno esta incluido, la cena no, se puede avisar, y el chef hace maravillas (no es menu a la carta)

Estuvimos solos en el hotel recorriendo sus hectáreas de bosquecito y jardines. Estupendo espacio para relajarse junto a la laguna. Para encontrar espacio natural , silencio y reconectarse con paz. Las cenas Preparadas por Esteban exquisitas, con gusto, delicadeza, manjares. Volveré con muchas ganas.

Fuimos un par de días en familia en las vacaciones de invierno, el lugar es muy lindo, lleno de paz y en medio de la naturaleza, la hostería de piedra, muy linda y bien mantenida. El desayuno bueno, aunque por el precio del alojamiento yo hubiera esperado más. Lo que hay que tener en cuenta es que estás a 20km del centro de SFVC y aquí no se puede almorzar ni cenar. Te lo ofrecen como servicio que hay que contratar anticipadamente, pero en el momento que consultamos nos dijeron directamente que no....si bien nos gustó el lugar, si no agregan más servicios, es una pena llegarse hasta allá. Una sugerencia para el dueño, a quien no vimos en todo el fin de semana que nos alojamos.