波薩達聖瑪利亞拉雷阿爾飯店(Hotel Posada Santa Maria la Real)

Lugar con cierto encanto por el conjunto del monasterio en el que está integrado. Recibimiento correcto y con disposición de ayudar. El alojamiento bien y con todo lo necesario. Muy agradable el comedor donde desayunamos. Buen desayuno. Dispone también de una terraza exterior cercada con piedra a juego con el monasterio y cubierta de césped.

Muy mala experiencia con la encargada del evento las formas como nos trato y como hablaba con malas formas dejan mucho que desear ya que se la paga para que haga un buen evento y haya buen rollo para volver pero no creo que sea el caso ya que no volverá a suceder. No pongo 0 estrellas o puntuación porque no se puede

Hosteria nomal habitaciones -celdas pequeña y incomodas (en relación con el precio) un poco descuidadas de mantenimiento ,limpias ,desayuno correcto al precio ,restaurante menu flojo ,servicio no profesional pero correcto , limpieza bien .En general y como esperiencia (dormir en una celda) y por el lugar (Monasterio) consideramos que ha merecido la pena

Impresionante la localización de la posada con fondo de montaña rocosa y por el otro lado el monasterio. El exterior de la posada muy bonito con un encanto máximo añadiendo zona de terraza y jardín súper apetecible. La habitación he de decir que las fotos de la web están increíblemente bien hechas porque parece mucho mejor que la realidad. He de decir en favor del establecimiento que no quedaban triples por lo que al añadir una cama supletoria y ser hla habitación tan pequeña la sensación fue bastante agobiante. El baño… para no olvidar. Creo que necesitan una reforma urgente en los baños de verdad… El personal encantador y un desayuno correcto.

Estancia perfecta, maravilloso servicio y atención al cliente. Un edificio maravilloso patrimonio histórico junto al museo del románico. El concepto de las habitaciones es muy original , recrean una época a conjunto del monasterio. Restaurante muy bonito y de calidad. Además de un acogedor y especial jardín con vistas al monasterio y una ubicación perfecta a 5 min andando al centro de la villa de Aguilar de Campo. Nos encantó, volveremos sin duda!!!

Maravilloso y elegante alojamiento. La estancia fue inmejorable, las habitaciones muy limpias y cuidadas, la cama muy cómoda, el servicio muy agradable. Además hay zonas de aparcamiento gratuito y un restaurante con un menú económico y satisfactorio. Cuenta con un buffet de desayuno muy completo. La Posada conserva la esencia de los tiempos pasados y los elementos románicos originales que la caracterizan. Nos encantó, sin duda volveremos!!!

Uno de los peores sitios en los que he estado. No sé ni por dónde empezar. - Las habitaciones están muy poco cuidadas. - La puerta de la habitación no cierra (da igual que te den llave, cualquiera puede entrar). Lo que te hace sentir muy seguro. - El baño es diminuto, sucio y mal cuidado. Si mides 1.80 o más no puedes estar de pie. El techo del baño es muy bajo(no sé hasta qué punto es si quieres legal lo bajo que es). La "bañera"que anuncian, es un plato de ducha con forma de bañera. En el cual tampoco te puedes mantener de pie (por lo bajo que son los techos). Haciendo muy difícil ducharse - Las habitaciones "dúplex" no se parecen en nada a lo que se muestra en la fotos de la web del hotel. Son diminutas. Lo único bueno es el personal, que eran cercanos y atentos. Por lo demás el sitio es nefasto. Pagar por un hotel de 4 estrellas, pero con calidades de hostal de mala muerte. No volveré. Y si me preguntan por el sitio solo tengo dos palabras "huid insensatos".

Este alojamiento esta lejos de los estandares de calidad que se le suponen a una Posada Real, marca soportada por la Junta de Castilla y León. Para empezar, el aparcamiento esta fuera del alojamiento, en un camino de tierra y sin vigilancia. Las habitaciones duples, tienen un baño minimalista y no son aptas para personas con dificultades en su movilidad. No hay ascensor y las maletas has de subirlas como puedas. El restaurante no esta muy bien atendido y el desayuno es un simulacro de buffet. Resumiendo, si la Junta quiere potenciar esta marca turistica, ha de hacer mucho mas y mejorar sus calidades.

Es una pena y me disgusta hablar mal de un sitio, pero lo del Dúplex no tiene disculpa. En realidad es una mini habitación con un altillo donde la cama arriba solo la pudimos utilizar uno porque si el otro, que estaba al lado de la pared, quería bajar al baño, tenía que hacerlo por encima de la otra persona. La escalera complicada y peligrosa, y el baño tan pequeño que no podíamos ni movernos, y eso que no medimos más de 1,70. El personal amable y el sitio bonito pero la habitación es deplorable y me molesta que no te avisen de como es.